jueves, octubre 09, 2008

El Ultimo Respiro


Ví tu rostro quejumbroso perecer con la tarde,
y al arribo de la noche, el despertar de tu silencio,
pues de tu rostro, aún húmedo de lágrimas,
despojaste los gemidos,
esos que te desgarraban las entrañas.
Ese palpitar abatido,
ahora enfrenta una noche auspiciosa,
que te invita a volar al oscuro firmamento,
exaltando su profundidad,
liberando tu angustia.
Volcaste el sufrimiento en su regazo,
y se iluminó el universo de una magia ignota,
fascinante a toda mirada.
Pude respirar ese consuelo,
que me llegaba en el susurro de la nocturna brisa.
Pero todo duró un segundo,
y la visión ya desvanecida,
me devolvió mi realidad dolorosa,
¡Quise que fuera real, tanto quise!,
pero no logré convencer a mi alma
ni apartarla del infierno en la que estaba sometida.
El amargo llanto, ya traía sus mejillas sumergidas
y ahogaba su piel, retorcida de lamentos.
Se escapó la gloria de mis ojos,
y mi boca tragó el lodo más amargo,
que envenenó mi vida,
y le arrebató, por fin,
el último respiro.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Bellisimo! este poema me ha gustado mucho ;)

Tu admirador
Pablo

Anónimo dijo...

Un muy buen poema lleno de instates llenos de pasion... me gusto

tengo algunos detalles que me gustaria que supieras je...

Anónimo dijo...

necesito de nuevo material tuyo :P

Tu admirador :)

Pablo