Entre lágrimas, te descubro en la inmensidad del firmamento,
trepando entre cada constelación
y mirándome a través de cada estrella.
Te posas sobre la cúspide del infinito
y te precipitas para aterrizar
y sumergirte en aquel océano majestuoso.
Pronto apareces,
cabalgas sobre las olas
y altiva te arrojas sobre la playa
vestida de espuma.
Te levantas, te acercas y besas mi mejilla,
ahora disfrazada de brisa perfumada,
que me penetra para adormecer mi llanto.
Aquella esencia encantadora me habita por completo
y ahora soy yo quien se descubre en el firmamento,
en la inmensidad del océano,
en el perfume de la brisa...
Ahora yo soy melancolía...
Qué mejor fotografía que las palabras que salen de tu mente
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viernes, diciembre 23, 2005
miércoles, diciembre 21, 2005
Ausencia
Mi piel imploró por ti
mas mis ojos no te vieron regresar,
mi garganta arrojó alaridos
hambrientos de tu respuesta
que mis oídos no lograron escuchar.
Mi corazón desangrando te nombró agonizante
mas se quedó sin recibir tu auxilio,
mis labios sedientos se marchitaron
pues la humedad de los tuyos
ya no estaba conmigo.
Mi nariz inspiró tu aroma ausente
que se transformó en esencia vacua
Mi sangre desbordó como furiosa vertiente
y los dedos de su lecho no te alcanzaron
para nuevamente traerte a mi alma.
Mi mente inventó en sueños tu retorno
y arrojó al viento el olvido,
mas mi alma decepcionada y vencida
se entregó sin resistencia alguna
a aquel último suspiro.
domingo, diciembre 18, 2005
Llora
Llora, niña, llora
hasta que ese torrente de lágrimas,
oscuras de dolor,
tiñan tus ojos desolados de agonía.
Llora,
hasta que ese llanto
ahogue con su intenso caudal
toda ilusión,
haciendo naufragar todos tus sueños.
Llora,
hasta que estalle tu alma
que gime en las tinieblas del abandono;
hasta que tus sentidos
apaguen su clamor
pidiendo su retorno;
hasta que la ilusión se deslice
por el filo asesino de la decepción.
Sí,
llora, niña, llora,
hasta que sientas
que el frío ensombrecedor
haga nido en tus venas;
y así, agotada,
caigas en un sueño profundo,
abismante,
que sólo te haga perecer
en el cruel olvido...
hasta que ese torrente de lágrimas,
oscuras de dolor,
tiñan tus ojos desolados de agonía.
Llora,
hasta que ese llanto
ahogue con su intenso caudal
toda ilusión,
haciendo naufragar todos tus sueños.
Llora,
hasta que estalle tu alma
que gime en las tinieblas del abandono;
hasta que tus sentidos
apaguen su clamor
pidiendo su retorno;
hasta que la ilusión se deslice
por el filo asesino de la decepción.
Sí,
llora, niña, llora,
hasta que sientas
que el frío ensombrecedor
haga nido en tus venas;
y así, agotada,
caigas en un sueño profundo,
abismante,
que sólo te haga perecer
en el cruel olvido...
sábado, diciembre 10, 2005
Añoranza
Hoy un sueño me transportó a tus brazos,
al misterio de tus ojos,
a la suavidad de tus labios.
La dulzura encantadora de tu voz
volvió a agitar mi corazón
aún dañado con tu partida.
Tanto colmó tu presencia utópica mi interior
que me vi envuelta en confusión
y quise huir.
Al despertar un suspiro
me embriagó el alma
y un mar de añoranza inundó mis ojos.
¡Qué amargo es el sabor de tu ausencia,
qué eterna la agonía de tu olvido!
Más cuando mi corazón aún embriagado de ti
clama al viento tu retorno,
escuchando sólo un eco en el vacío.
Abrazar el Infinito
Me deslizo por contornos húmedos,
recorriendo sendas de difícil acceso,
me elevo y desciendo,
temerosa transito;
me permito explorar y descubrir.
Tentador desafío es confirmar esta hipótesis,
experimentar la teoría.
Ahora agito contigo mi andar,
acelero mi búsqueda,
y me pierdo en tu ansiedad contagiosa,
rebelándome al misterio;
dejándome seducir por el deseo.
Al fin, sucumbo al privilegio
de poseer la gloria.
Transformo en víctima mortal, mi inocencia,
y me rindo, entre besos y suspiros,
a la aventura de abrazar el infinito.
domingo, diciembre 04, 2005
Mi estrella
Imponente, altiva y majestuosa
te encuentro;
colgada en mi eterno cielo nocturno,
aquel cielo que hiciste tuyo
con tu sola presencia.
Desde allí todo lo gobiernas
con tus ojos mágicos,
hasta el último rincón inexplorado
abarcas con la melodía de tu voz,
tan sólo un susurro
emanado de tus labios
me ahoga de sensaciones,
mi voluntad se hace vulnerable
y me es imposible negar
prestar toda mi atención
hacia aquella luminosidad sublime.
Capturas mis sentidos,
anticipándome la gloria infinita.
Sí, quiero ser contigo
aquella inagotable fuente de luz
y quiero que seas conmigo
la perfección de la belleza estelar.
domingo, noviembre 27, 2005
Renacer
Me refugio en la melodía oscura
de mi penumbra,
bajo el amparo de la noche
ya sin estrellas.
Ahora, el dulce veneno de tu recuerdo
y la nostalgia me alimenta;
me nutre el vacío de no tenerte,
me fortalece;
respiro la soledad inmensa
que ahora se me hace imprescindible.
Esta eterna calma me estabiliza
y renazco desde lo profundo,
me hago reina de este imperio...
Miedo
En un instante,
ecos subterráneos invaden mi mente,
sonidos fantasmales me ensordecen.
Cadenas, gruesas cadenas
apresan sin piedad
mis más profundos anhelos.
Gime mi alma sin voz en la nada,
desesperada, atrapada sin salida.
Mis ojos ahora ciegos
son incapaces de guiar mis pasos
hacia ningún lado.
El pánico impide cualquier movimiento,
de todo se adueña y me paraliza,
me vuelvo su esclava,
mi mundo se torna ajeno.
En esta bóveda en la que ahora me encuentro
comienzo a desaparecer,
ni siquiera soy cenizas, polvo, un suspiro:
Todo es miedo...
lunes, noviembre 14, 2005
Océano de Recuerdos
Miro mi reflejo
sobre ese océano inmenso de recuerdos,
obra de arte magnífica
cargada de emociones
y me siento hipnotizada
por aquella mágica serenidad.
En un instante
aparece nítido frente a mis ojos
uno de aquellos momentos
y vuelvo a revivirlo intacto;
mi interior vibra, mi corazón se agita,
todo mi ser se estremece.
Mas en un segundo reacciona,
reconoce lo irreal.
Con ello, emana muda una lágrima
que rodando por mi mejilla
se precipita vencida, decepcionada
hacia aquellas aguas serenas.
Es aquella delicada muestra de debilidad,
la que atenta contra aquella paz infinita,
transformándola en desesperación.
Me derrumbo y comienzo a inundarme,
ahogándome en un millón de recuerdos...
domingo, noviembre 13, 2005
Quédate
Aquí me tienes nuevamente, dulce niña;
he presenciado tu caída
y te he recogido entre mis brazos oscuros y fríos.
Sí, en el ocaso te encontré
y te robé la noche que anhelabas,
la reemplacé con penumbra y oscuridad completa.
Ahora quédate que tus miedos me fortalecen
y yo te ofrezco mares de lágrimas,
tristeza y nostalgia.
Quédate que la desesperanza es mi lema
y mi consecuencia la agonía.
No intentes huir,
sólo descansa en mis brazos.
Conmigo estás segura, inerte, vacía...
Atrapada
Vuelvo a tropezar con tu recuerdo,
aquel que como arena movediza
me impide avanzar
hacia aquellos ocasos de esperanza,
hacia aquel horizonte
cargado de nuevas noches.
Mi vida da vueltas
cual tornado,
arrasando un corazón nostálgico,
destruyendo un alma aún vulnerable.
Tu recuerdo no quiere abandonarme,
se derrama uno tras otro,
apareciendo como fantasmas
que me asfixian, me hacen daño.
Un llanto entrañable
surge inmediato causando
una profunda conmoción,
que me lleva a escenarios vacíos,
cubiertos con niebla espesa,
una niebla que me ciega,
me colma de temores,
temores arraigados,
con los cuales debiera luchar
mas soy débil, demasiado débil.
El manto oscuro todo lo cubre,
las sombras todo lo rodean,
todo tiembla, me ahogo, ya no respiro...
lunes, octubre 24, 2005
Abismo
Este caminar ya sin sentido
me precipita hacia un abismo profundo inminente
y me siento caer, eternamente caer,
pesada como roca hacia la nada.
Mi corazón se agita con la aparición
de una secuencia infatigable de imágenes
de tantos momentos juntos,
y cada uno de tus besos
se transforman en puñales
que atraviesan cada fibra de mi ser,
matando tu recuerdo.
Me asfixio sin remedio,
agoniza mi alma,
esta sombra de muerte
todo lo quiere cubrir,
pretende asesinar
toda huella de esperanza.
Puedo casi tocar el vacío,
vacío que dejaste con tu silenciosa despedida;
soltaste mi mano,
me dejaste caer,
abandonaste este sueño.
Ahora me abandono en tu ausencia silenciosa,
casi mortal,
y me hago parte de este abismo,
oscuro, colmado de nada, de vacío.
Aquí soy parte de todo...
domingo, octubre 23, 2005
La playa
Cada anochecer,
encuentras su silueta solitaria
sentada frente a aquel mar inquieto,
testigo de pasados momentos colmados
de besos y caricias.
Sus mejillas, hoy bañadas de lágrimas,
frut de tantos recuerdos que se repiten sin piedad
en su interior:
recuerdos de un amor que no está,
recuerdos de un sueño del cual un amanecer le hizo despertar,
recuerdos de un encanto que murió en su destello mágico.
Ya no encuentra futuro,
se desvaneció junto con sus esperanzas
y se le va la vida sin remedio,
sumida en la desesperanza, la decepción, la tristeza
y desde lejos se puede escuchar su canto melancólico
cuyas rimas dejan de manifiesto
que su vida ya no tiene sentido sin él.
Cuando se aproxima el amanecer,
se le ve atravesar el bosque
y permanecer extraviada en él
hasta cuando se viene el siguiente anochecer
que le trae de vuelta a esta playa
por el resto de sus días...
viernes, octubre 21, 2005
Tu recuerdo en mi soledad (canción)
Viniste del cielo
y me robaste el corazón,
me hiciste feliz con tu amor;
mas nunca me puse a pensar
que esto tan poco iba a durar
y yo de ti me enamoré.
Es cierto me robaste el alma entera
y te quedaste con ella
y mi vida se acabó.
Es cierto me forjé ilusiones nuevas
y ahora nada me queda
sólo tu recuerdo en mi soledad.
Cada día que pasa
te recuerdo más y más,
se llena mi mente de ti al recordar.
Recuerdo tus besos, tu mirar,
tus caricias mudas al amar
y vuelvo a decirme que te amo.
Estrella Fugaz
Y trato de huir,
pero viajo en sentido contrario
y te encuentro nuevamente.
Te conviertes en adicción,
fruta prohibida, tentadora y deseada;
me haces explotar en sensaciones;
me remueves;
me acaricias con tu respiración;
me seduce tu presencia
y me regalas libertad,
libertad que a la vez
me encadena a todo lo que me provocas;
sublime fascinación que me enloquece
y me roba la voluntad;
este eterno deseo de tenerte me ahoga;
pero de pronto desapareces, ya no estás,
fuiste tan sólo una estrella fugaz
invadiendo por un instante mi noche apacible
y abandonando esta alma ansiosa de ti...
sábado, octubre 15, 2005
La Soledad
En el principio de la agonía
se halla agazapada entre el miedo,
la angustia y la desesperanza;
en aquel instante en que la lluvia de lágrimas
ahoga hasta tu alma,
se pueden oir sus pasos acelerando su andar;
y cuando la desilusión comienza a vencer
con su inmensa carga
los brazos ahora cansados de esperanza,
emerge altiva cubriéndolo todo
con su manto lleno de noche,
tornando frío y silencioso
cada rincón de tu ser
y regalándote sin compasión
nostalgia de recuerdos
de momentos que no
se podrán concretar jamás...
se halla agazapada entre el miedo,
la angustia y la desesperanza;
en aquel instante en que la lluvia de lágrimas
ahoga hasta tu alma,
se pueden oir sus pasos acelerando su andar;
y cuando la desilusión comienza a vencer
con su inmensa carga
los brazos ahora cansados de esperanza,
emerge altiva cubriéndolo todo
con su manto lleno de noche,
tornando frío y silencioso
cada rincón de tu ser
y regalándote sin compasión
nostalgia de recuerdos
de momentos que no
se podrán concretar jamás...
sábado, octubre 08, 2005
Silencio
Silencio de ausencia
que traes contigo un mar infinito
de lágrimas contenidas,
pues inquietas con aquella inmensa carga
de incertidumbre un corazón desnudo,
vulnerable y entregado sin medida.
Te tornas cruel y derrumbas expectativas,
transformas ansias en desesperación,
encadenas y llevas a la agonía.
Las certezas se desvanecen
junto con toda esperanza,
y no dices nada, pero dices mucho.
Permaneces insensible, envolviéndolo todo...
lunes, octubre 03, 2005
El fin
Cómo poder traducir aquella mirada cargada de tristeza,
cómo consolar aquel corazón ahogado en llanto,
que derrotado por la ausencia se desangra,
cómo calmar aquellos ojos que no pueden contener el torrente de lágrimas que buscan gritar la pena inmensa que provoca su partida...
Es inevitable, pues con esto se acaba su mundo,
ya no queda nada para ella,
y explota en llanto, volcando su alma,
quedando vacía, y entre sollozos pronuncia por última vez su nombre,
cuyo eco resuena en la inmensidad del olvido.
Él se ha ido, es el fin...
domingo, octubre 02, 2005
Un sueño
...Y cual doncella ansiosa de la llegada de quien
la liberara de su eterno cautiverio,
entregó hasta el alma a quien había reconocido
como su salvador.
No existía para ella más mundo que aquel que construía con él...
Una fortaleza con bases sólidas, que no dejaban
siquiera la posibilidad de sombras de amenaza de destrucción.
Se embarcó sin llevar más prenda
que aquellas con las que andaba...
Pudo disfrutar sin duda de tanta magia y encanto,
cual cuento de hadas...
Se sintió parte de un firmamento cargado de estrellas,
eterno, sublime en compañía de su amado.
Completaba con él el más hermoso paisaje celestial...
Todo era demasiado real..
Mas, no había pasado mucho cuando de pronto sintió una brisa helada
que llegó hasta su corazón y éste se etremeció y tuvo miedo...
Abrió los ojos y ya no había cielo,
sólo cuatro paredes que la rodeaban..
Gritó..mas, no hubo quien la escuchara,
calló y comenzó a escuchar cánticos cargados de tristeza,
de amores y batallas perdidas y se preguntó qué sería
de aquel noble caballero, que había propuesto sacarla para siempre
de aquella prisión...
Pero sólo vino a su mente la idea de que todo había sido un sueño,
y lloró, amargamente, dolía demasiado la ausencia, la soledad...
Luego cantó, uniéndose a los coros que escuchaba a lo lejos,
estaba invadida su alma de tristeza, pues nuevamente
estaba cautiva de aquella soledad inmensa,
que en ocasiones la ahoga...
Y todo vuelve a ser como siempre...
Estoy sola...
viernes, septiembre 30, 2005
Nostalgia
Aún brillas para mí
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