En mi último suspiro
que me aparta de este mundo,
cuando no queda respiro,
sólo un exhalar profundo.
Aparecen espontáneas
las escenas de mi vida,
que figuran instantáneas
acelerando mi partida.
Junto a ellas mi agonía
me arrebata lucidez,
pierdo esencia y armonía
ya no queda nitidez.
Es un túnel lo que veo,
hacia una divina luz,
mi hora llega ya lo creo,
esta es mi propia cruz.
Los dolores ya han mermado,
todo es serenidad,
doy un paso de este lado
a la bella eternidad.
1 comentario:
que rico leerte, aunque sea medio apurado... es lo malo de estar en la playa... mi vicio internet no se puede saciar con un rato de ciber
Publicar un comentario