Extirpar toda huella de ilusión,
hasta la más ínfima seña de esperanza anular;
toda ansia de emprender camino bloquear,
es la orden que le doy al corazón.
Cualquier brillo de utopía apagar,
Y suspender todo anhelo que pretenda surgir;
Con tinta oscura cada trazo de ensueño he de teñir
para fulminar instantáneo mis deseos el volar.
Aplacar falsos encantos para así nutrir
el alma de silenciosa soledad
para que se colme de oscuridad
y no tener más motivos para sufrir.
Deja en tinieblas eternas todo mi ser
y así permanezca inerte mi alma, presa del letargo
permaneciendo para siempre en el anochecer.
Que su reposo se haga un sueño largo,
que impida a la tristeza renacer,
haciendo que aquella penumbra silente sea su eterno encargo.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario